jueves, 31 de enero de 2008

Cría cuervos y te sacarán las perras




Cuando las cosas van bien para la economía (para "su" concepto de economía, claro) no reparten, con suerte, más que migajas. Cuando vienen mal dadas hay que apretarse el cinturón porque si no se irán a Polonia o Malasia o donde puedan seguir creando riqueza, los pobrecicos.

Me gustaría que el ultraético PP usara en este caso la doctrina de no negociar con terroristas. Pero supongo que todos pondrán el culo: nuestro culo. Y quien quiera vaselina que se la pague, que no existe nada gratis.

miércoles, 30 de enero de 2008

Honradez, propaganda y programas

Tres viñetas que me han encantado:





martes, 29 de enero de 2008

Las cosas gratis y la falacia espesa

Hace un par de semanas en el suplemento de El Mundo entrevistaban a un tal Gabriel Masfurrol, que al parecer se ha forrado con una cadena de sanidad privada en los estéits o algo así. La verdad es que no lo he leído porque no me interesa lo más mínimo, pero mientras pasaba la página algo me saltó a los ojos:
P. Señor Masfurroll, ¿la sanidad debiera ser un servicio público, gratuito y universal, o un bien privado y elitista?

R. Gratuito no hay nada, y quien lo diga, miente. Los hospitales públicos de este país se financian con los impuestos de los españoles.
Esta falacia lógica ya la he visto más veces entre los liberalillos. Obviamente, si te da por interpretar "gratis" en el sentido de "a nadie en ninguna parte del multiverso le cuesta nada", gratis-gratis solo son las flores del campo, y aún así no sé yo. Pero para el resto del mundo (al menos los que no nos inventamos el significado de las palabras) "gratis" significa "al que lo adquiere no le cuesta nada", y desde luego sí existen las cosas gratuitas [1].


Maldito peluche mentiroso... salvo que los repartidores se teleporten (y ni por esas)
tendrán que pagar la fregoneta y la gasofa, o la empresa de paquetería.


Si no tienen ordenadores de aire que funcionen violando
los principios de la termodinámica y los conectan a internet a base de magia,
esto es mentira. ¡Nada es gratis!



Y estos, los peores de todos. Yo que creía que emagister nos había robado a Sergio a cambio de dinero ¡y no! ¡Ahí todos trabajan sin cobrar! Porque si no (ya sin ni siquiera tener en cuenta los ordenadores antitermodinámicos) serían unos mentirosos, y eso está muy muy feo.


Si alguien odia al tal Masfurrol solo tiene que llevarle a un supermercado: con tanto "¡+20% gratis!" en las estanterías le iba a dar un síncope. Menos mal que se puede pagar operaciones de corazón no gratuitas.


[1] Sí, me siento tonto diciendo esto. Pero hey, podría ser peor: podría creerme ese argumento liberalillo.

Descubrimiento personal

Esta mañana, mientras iba a comprar el pan, me di cuenta de que llevo media vida jugando al rol.

Y si incluyo los años en que, de alguna forma, ya era rolero aunque no jugara (a base de librojuegos y otras frikadas), ya van más de dos tercios y casi casi tres cuartos.

Te cagas... Empiezo a tener la sospecha de que esto no se me va a pasar XD

Freakie el Vikingo

Alguien que es probable que quiera permanecer en el anonimato me pasa este enlace: Frikie el Vikingo. Es un blog en el que se dedican a hacer copias de seguridad optimizadas de juegos de tablero y cartas, con archivos que bajarse para imprimir. No lo he mirado a fondo, pero tiene una pinta estupenda. Os anarroseo lo que pone al final de la página, por si acaso nos lee Ramoncín o algún fundamentalista:
Freakielvikingo es un blog sin ánimo de lucro que persigue dos fines concretos. El primero es servir como repositorio para aquellos usuarios que tras adquirir un juego de tablero hayan perdido parte de sus componentes. El segundo es proporcionar a los usuarios un medio para poder probar aquellos juegos que aún no conocen, con fines únicamente promocionales, para que puedan juzgar si es de su agrado antes de adquirirlo.
Al utilizar este blog, el usuario acepta que cualquier descarga realizada, (o impresión de la misma) será borrada (o destruida) en un lapso de 24 horas, lo cual es un tiempo razonable para probar el juego. El usuario podrá conservar las descargas e impresiones del blog por tiempo indefinido si cuenta con el medio original.
Ni Freakielvikingo ni sus contribuyentes aceptan la responsabilidad en caso de que el usuario decida conservar los contenidos más allá del plazo permitido.
Ni Freakielvikingo ni sus contribuyentes promocionan ni apoyan la piratería ni los contenidos ilegales. El uso de este blog, su lectura y las descargas que de él se realizen implican la aceptación de estos términos por parte del usuario.
Me encanta la gente que hace este tipo de cosas... A ver si hay suerte y alguien hace una copia de seguridad del Dragon Pass y/o el White Bear, Red Moon (si sabes de lo que hablo, eres MUY friki XD ), que les tengo ganas.

lunes, 28 de enero de 2008

El apóstol de la Verdadera Fe

Cada vez más personas de altura intelectual salen del armario pastafari.
Sin duda alguna ahora el Fary está en el cielo,
disfrutando del volcán de cerveza y la fábrica de strippers.

viernes, 18 de enero de 2008

Campaña a favor del neologismo "gallardonado"

Anarroseo [1] de Malditas mentiras esta gloriosa propuesta. En un país en el que a los dos días de lo de Biescas o de lo de Irene Villa ya se hacían chistes, mucho estábamos tardando en pensar en algo así XD
Ya estoy harto de ver en foros y comentarios el uso de un barbarismo como"pwned": jerga americana de jugador en red con ínfulas de l33t, de corte patibulario y con el error tipográfico incluido que no es más que una forma eufemística de decir "se te han/te he follado". Desgraciadamente, una alternativa en español no era cosa fácil, hasta que ayer vi la luz leía sobre el estado de la política crispañola en los partidos de centro: una palabra fácil de recordar, española en su morfología, rotunda y que irónicamente recuerda a otra ("galardonado") de significado contrario: gallardonado.
Más motivos para usar esta hermosa palabra en Mentiras, malditas mentiras y estadísticas.

Os animo a todos a haceros eco de esta espléndida iniciativa ciudadana.


[1] Anarrosear, otro genial neologismo, responsabilidad en este caso de EmeA.

sábado, 12 de enero de 2008

Vergüenza musical ajena

Esta noche mientras cenaba he visto en la tele un engendro de mucho cuidado. Se llama Al pie de la letra, y es el programa que más vergüenza ajena me ha producido en mucho, mucho tiempo, y mira que es difícil superarse en esa competición. Por el trozo que yo he visto (unos quince minutos, pero parecían una hora) es un concurso de karaoke. Con eso os lo digo todo.

He asistido atónito a un espectáculo infame en el que no se salvaba absolutamente nada. Ni los concursantes (por no saber cantar, por sus bailes idiotas, y en general por su absoluta falta de sentido del ridículo), ni el presentador, ni las (horterísimas) pintas de nadie, ni el decorado, ni la voz de los cantantes (que deberían (y no "deberían de") ser profesionales), ni los bailes de las azafatas, ni... ni... ni... NADA.

(Por favor, un mensaje para los que apalearon a José Luis Moreno: Si me estáis leyendo, haced justicia y sacudidle al responsable de este engendro. También tiene mucho de lo que responder. Gracias.)


Y sin embargo, no lo habría comentado si no fuera porque hace un rato he sentido aún más vergüenza ajena:

¡Viva España!
Cantemos todos juntos
con distinta voz
y un solo corazón.

¡Viva España!
Desde los verdes valles
al inmenso mar,
un himno de hermandad.

Ama a la Patria
pues sabe abrazar,
bajo su cielo azul,
pueblos en libertad.

Gloria a los hijos
que a la Historia dan
justicia y grandeza
democracia y paz.

El ABC ha conseguido que le filtraran la letra del himno:
Tiene cuatro párrafos y su autor es un hombre. El jurado encargado por el Comité Olímpico Español (COE) y la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) para elegir la letra del himno ya ha tomado su decisión. (...)

Y será Plácido Domingo, como ya adelantó ABC, quien estrene la nueva letra del himno nacional. Desde un primer momento, el tenor madrileño se mostró encantado con la idea, agradecido y orgulloso, y removió su calendario para ajustar las fechas y poder viajar a Madrid. El himno se estrenará el próximo día 21, coincidiendo, además, con el cumpleaños del propio Plácido Domingo (...).
Los culpables del engendro ya sabéis quiénes son: el COE (por si no les bastara con ir por ahí ensuciando las tiernas mentes de los niños con las bazofias esas de que el deporte es salud y la competitividad es buena y blablablá) y la SGAE, que acabará chupando del bote de una u otra manera.

De todas formas se supone que esta letra no es legalmente la del himno, pero está (o estará, o lo que sea) una recogida de firmas para que la apruebe el Congreso. Que no se molesten: ya se envolverá el PP en esa bandera. Con lo que le molan esas chorradas.

Lo he visto en Escolar. Seguid los enlaces, que son interesantes. También os recuerdo el auténtico y genuino himno de españa consagrado por generaciones de escolares, y esta entrada de Darth al respecto.

sábado, 5 de enero de 2008

Psicología de baratillo: el rollo bollo

Si tienes en alta estima tu salud mental, no sigas leyendo. Os propongo un viaje al tipo de mente más sucia del multiverso. Una psique enferma y depravada en la que si entras tal vez no puedas salir jamás. Si miras al abismo, blablablá y todo eso. Prepárate para entrar en la cabeza de...

... un hombre heterosexual
[¡rayos y truenos!]
(los efectos especiales hay que imaginárselos)

Uno de los misterios que encierra este tipo de mentes retorcidas es ¿por qué les ponen cachondos las fantasías lésbicas? Ya sabéis, dos chicas que se dan el lote pero cuando aparece un hombre se le tiran encima hambrientas. De acuerdo, de acuerdo, hay tíos (gays aparte (supongo XD )) a los que esto no les excita. Pero como a la inmensa mayoría sí, podemos separar con desprecio a esa ridícula minoría y apuntarles acusadores con el dedo llamándoles ¡pervertidos!

Volviendo al tema: ¿por qué a los tíos les gusta tanto el rollo bollo? Las explicaciones fáciles y habituales serían "mejor dos que una" (y su versión "mejor cuatro que dos") o "las tías son mucho más hermosas, elegantes y sensuales que los tíos y por tanto es bonito de ver", etc; aunque este tipo de cosas influye, yo creo que la explicación fundamental es un poco más complicada y tiene que ver con el ego. La secuencia mental iría más o menos así:

1. ¿Qué es lo mejor que se puede uno tirar? Una tía, por supuesto
2. Por tanto, si una tía quiere tirarse a alguien, lo suyo es que se tire lo mejor disponible: otra tía.
3. PERO si cuando YO me acerco las dos me prefieren a mí...
4. ¡... YO soy lo mejor que se puede tirar una tía! ¡Soy la hostia! ¡Viva yo!

Vale, es una chorrada de razonamiento, pero qué le vamos a hacer, los tíos son limitadillos.


Ya podéis salir de esa sucia mente masculina, si podéis. Os animo (especialmente a las chicas ;P ) a que en los comentarios dejéis vuestra propia explicación, e incluso a que confeséis si os va o no el rollo bollo (de nuevo, que hablen sobre todo las chicas XD ).

martes, 1 de enero de 2008

Tema del traidor y del héroe

Repito lo mismo del año pasado: puestos a anarrosear, mejor a los grandes.
Este año le toca a Borges.

So the Platonic Year
Whirls out new right and wrong
Whirls in the the old instead;
All men are dancers and their tread
Goes to the barbarous clangour of gong.
W. B. Yeats: The Tower

Bajo el notorio influjo de Chesterton (discurridor y exornador de elegantes misterios) y del consejero áulico Leibniz (que inventó la armonía preestablecida), he imaginado este argumento, que escribiré tal vez y que ya de algún modo me justifica, en las tardes inútiles. Faltan pormenores, rectificaciones, ajustes; hay zonas de la historia que no me fueron reveladas aún; hoy, 3 de enero de 1944, la vislumbro así.

La acción transcurre en un país oprimido y tenaz: Polonia, Irlanda, la república de Venecia, algún Estado sudamericano o balcánico... Ha transcurrido, mejor dicho, pues aunque el narrador es contemporáneo, la historia referida por él ocurrió al promediar o al empezar el siglo XIX. Digamos (para comodidad narrativa) Irlanda; digamos 1824. El narrador se llama Ryan; es bisnieto del joven, del heroico, del bello, del asesinado Fergus Kilpatrick, cuyo sepulcro fue misteriosamente violado, cuyo nombre ilustra los versos de Browning y de Hugo, cuya estatua preside un cerro gris entre ciénagas rojas. Kilpatrick fue un conspirador, un secreto y glorioso capitán de conspiradores; a semejanza de Moisés que, desde la tierra de Moab, divisó y no pudo pisar la tierra prometida, Kilpatrick pereció en la víspera de la rebelión victoriosa que había premeditado y soñado. Se aproxima la fecha del primer centenario de su muerte; las circunstancias del crimen son enigmáticas; Ryan, dedicado a la redacción de una biografía del héroe, descubre que el enigma rebasa lo puramente policial. Kilpatrick fue asesinado en un teatro; la policía británica no dio jamás con el matador; los historiadores declaran que ese fracaso no empaña su buen crédito, ya que tal vez lo hizo matar la misma policía. Otras facetas del enigma inquietan a Ryan. Son de carácter cíclico: parecen repetir o combinar hechos de remotas regiones, de remotas edades. Así, nadie ignora que los esbirros que examinaron el cadáver del héroe hallaron una carta cerrada que le advertía el riesgo de concurrir al teatro, esa noche; también Julio César, al encaminarse al lugar donde lo aguardaban los puñales de sus amigos, recibió un memorial que no llegó a leer, en que iba declarada la traición, con los nombres de los traidores. La mujer de César, Calpurnia, vio en sueños abatida una torre que le había decretado el Senado; falsos y anónimos rumores, la víspera de la muerte de Kilpatrick, publicaron en todo el país el incendio de la torre circular de Kilgarvan, hecho que pudo parecer un presagio, pues aquél había nacido en Kilgarvan. Esos paralelismos (y otros) de la historia de César y de la historia de un conspirador irlandés inducen a Ryan a suponer una secreta forma del tiempo, un dibujo de líneas que se repiten. Piensa en la historia decimal que ideó Condorcet; en las morfologías que propusieron Hegel, Spengler y Vico; en los hombres de Hesíodo, que degeneran desde el oro hasta el hierro. Piensa en la transmigración de las almas, doctrina que da horror a las letras célticas y que el propio César atribuyó a los druidas británicos; piensa que antes de ser Fergus Kilpatrick, Fergus Kilpatrick fue Julio César. De esos laberintos circulares lo salva una curiosa comprobación, una comprobación que luego lo abisma en otros laberintos más inextricables y heterogéneos: ciertas palabras de un mendigo que conversó con Fergus Kilpatrick el día de su muerte, fueron prefiguradas por Shakespeare, en la tragedia de Macbeth. Que la historia hubiera copiado a la historia ya era suficientemente pasmoso; que la historia copie a la literatura es inconcebible... Ryan indaga que en 1814, James Alexander Nolan, el más antiguo de los compañeros del héroe, había traducido al gaélico los principales dramas de Shakespeare; entre ellos, Julio César. También descubre en los archivos un artículo manuscrito de Nolan sobre los Festspiele de Suiza: vastas y errantes representaciones teatrales, que requieren miles de actores y que reiteran episodios históricos en las mismas ciudades y montañas donde ocurrieron. Otro documento inédito le revela que, pocos días antes del fin, Kilpatrick, presidiendo el último cónclave, había firmado la sentencia de muerte de un traidor, cuyo nombre ha sido borrado. Esta sentencia no condice con los piadosos hábitos de Kilpatrick. Ryan investiga el asunto (esa investigación es uno de los hiatos del argumento) y logra descifrar el enigma.

Kilpatrick fue ultimado en un teatro, pero de teatro hizo también la entera ciudad, y los actores fueron legión, y el drama coronado por su muerte abarcó muchos días y muchas noches. He aquí lo acontecido:

El 2 de agosto de 1824 se reunieron los conspiradores. El país estaba maduro para la rebelión; algo, sin embargo, fallaba siempre: algún traidor había en el cónclave. Fergus Kilpatrick había encomendado a James Nolan el descubrimiento de ese traidor. Nolan ejecutó su tarea: anunció en pleno cónclave que el traidor era el mismo Kilpatrick. Demostró con pruebas irrefutables la verdad de la acusación; los conjurados condenaron a muerte a su presidente. Éste firmó su propia sentencia, pero imploró que su castigo no perjudicara a la patria. Entonces Nolan concibió un extraño proyecto. Irlanda idolatraba a Kilpatrick; la más tenue sospecha de su vileza hubiera comprometido la rebelión; Nolan propuso un plan que hizo de la ejecución del traidor el instrumento para la emancipación de la patria.

Sugirió que el condenado muriera a manos de un asesino desconocido, en circunstancias deliberadamente dramáticas, que se grabaran en la imaginación popular y que apresuraran la rebelión. Kilpatrick juró colaborar en este proyecto, que le daba ocasión de redimirse y que su muerte rubricaría.

Nolan, urgido por el tiempo, no supo íntegramente inventar las circunstancias de la múltiple ejecución; tuvo que plagiar a otro dramaturgo, al enemigo inglés William Shakespeare. Repitió escenas de Macbeth, de Julio César. La pública y secreta representación comprendió varios días. El condenado entró en Dublín, discutió, obró, rezó, reprobó, pronunció palabras patéticas, y cada uno de esos actos que reflejaría la gloria, había sido prefijado por Nolan. Centenares de actores colaboraron con el protagonista; el rol de algunos fue complejo; el de otros, momentáneo. Las cosas que dijeron e hicieron perduran en los libros históricos, en la memoria apasionada de Irlanda. Kilpatrick, arrebatado por ese minucioso destino que lo redimía y que lo perdía, más de una vez enriqueció con actos y palabras improvisadas el texto de su juez. Así fue desplegándose en el tiempo el populoso drama, hasta que el 6 de agosto de 1824, en un palco de funerarias cortinas que prefiguraba el de Lincoln, un balazo anhelado entró en el pecho del traidor y del héroe, que apenas pudo articular, entre dos efusiones de brusca sangre, algunas palabras previstas.

En la obra de Nolan, los pasajes imitados de Shakespeare son los menos dramáticos; Ryan sospecha que el autor los intercaló para que una persona, en el porvenir, diera con la verdad. Comprende que él también forma parte de la trama de Nolan... Al cabo de tenaces cavilaciones, resuelve silenciar el descubrimiento. Publica un libro dedicado a la gloria del héroe; también eso, tal vez, estaba previsto.