El enemigo viaja en limusina, no en patera

El título es una pintada que hay en el túnel de Arco de Ladrillo.

Este tipo de cosas, presentadas encima como "evidentes", "decir las verdades", "hablar claro" y mandangas similares, se las traga mucha gente. Y empiezan a salir a la luz donde y cuando se ven ya muchos "diferentes". Los inmigrantes serán culpados (ya lo están siendo) de llevarse nuestro trabajo y de la bajada de sueldos, por enxiemplo; claro, toda esa cantidad de ingenieros congoleños y abogados colombianos nos birlan el trabajo. Esta gente solo influye en trabajos no cualificados.

Tampoco estoy muy de acuerdo con el argumento de que "cogen los trabajos que los españoles no quieren"; que paguen bien y traten a la gente como personas, y a lo mejor consiguen españoles. No se puede basar la rentabilidad de una empresa en tratar inmoralmente a tus trabajadores; sobre todo cuando te aprovechas de su debilidad.

Y sobre la bajada de sueldos, ¿quién tiene la culpa, el inmigrante que no tiene dónde caerse muerto y se ve obligado a tragar, o el empresario que se aprovecha de ello? Ya sabéis, el enemigo viaja en limusina.

Y, añado, somos nosotros solitos los que miramos mal al compañero de curro que se niega a hacer horas extras, y los que hacemos competiciones de machitos de a ver cuántos días no me he podido ir a comer a casa, y los que criticamos por vago al sobrino jovencito que deja sus primeros trabajos por cobrar una mierda en condiciones birriosas, y los que nos quejamos mucho de los jefes pero a la hora de la verdad la solidaridad obrera no aparece por ninguna parte. Nosotros solitos, sin ningún negro de mierda que se folle a nuestras mujeres, llevamos años dejándonos joder nuestras condiciones laborales.